BCCPAM000542-2-33p02d00000000

3 » > : 213 sn de las acciones del Dios humanado, datiabeiiad 4 su Mare. Lo hizo él. mismo de una manera breve y sucinta, pero bas- ‘tantemente clara, al manifestarnos, que era iniitil que*in- tentaramos nosotros hacer la’ descripcion de este objeto tan magnifico, pues, si no cubriamos nuestra vista con la ven- da de la fe, quedariamos ciegos al momento. Nos dice el Espiritu divino, que aparecié en el cielo una Muger vestida del sol, coronada de estrellas, y con la luna 4 sus piés: en lo que ‘se nos dice, | que solo el sol-de justicia puede com- es prender |la vida misteriosa de la que esta vestida de él como de su propio manto '. Son estas las dos causas, por que no se nos han descrito las acciones de nuestra Reina y Sefiora, la disposicion del cielo por una parte, y la humildad de la ‘misma Sefiora por otra *. Debemios por lo tanto.adorar los juicios del Sefior, a contentarnos con saber lo que la piado- sa tradicion nos ha conservado. ttake . Despues que Jesucristo se separd de sus Apéstoles, Maria Santiiine era el ordculo, 4'donde estos acudian para saber la verdad de las cosas, y obtener una solucion en sus dudas: no. habia quien no suspirase por verla y oir de sus libios una palabra: y cuando la pronunciaba, era recogida con ‘mas ansia, que el avaro mercader recoge los. diamantes y las perlas mR rece ae we primeras: lineas; del Evangelio be pag ee oreo en“aia literal ety ‘ui siti la “toa de Jesucristo, San Agustin, y conél muchos Padres y_ ores de gran saber, la aplican tambien en . sentido literal 4 la Virgen : a: dunque no pueda decirse en sentido literal, que padecta dolores para at luz, sino en el misiico, pues padecié intinitas penas y dolor ‘corazon y espi- tilu, para engendrarnos 4 nosotros 4 la gracia, como dicen. tambien los Santos Padres. (Apoe. cap. 12, v. 1.) : 2 Se cree que San Lucas aprendi¢ de los labios de la Santisima Viigen _ das admirables, noticias, qué nos da sobre la infancia de Jesus en los pri- meros eapitulos de su Evangelio: y él mismo.nos dice, que antes de orde- nar su narracion, se informé de las personas que habian visto los acon- fey: iQué silencio tan sublime guard6 sobre sf misma! (Luc. cap. Vv. 2.) 5_ Ha producido esta tradicion. antigua Juan Viguier, refiriendo una carta de San Ignacio 4 San Juan Evangelista, en la cual le suplica que le permita iir d visilar 4 la Madre de Jesus; pues no puede haber, dice, quien er . Pe Shit. ee

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz