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22 - Qué podran decir los hombres sobte esto, que lle- gue 4 explicar la realidad de las cosas con toda la extension que ellas tienen? Cuanto se diga sera po- co; pero por ‘muchas que sean las excelencias que se atribuyan 4 Maria, dejandola siempre en su sér de criatura , estara en armonia con la verdad de las co- ‘sas. ‘Pero no sucede otro tanto cuando se quiere echar mano de cosas puramente mundanas , como es el lujode los vestidos, y la cabellera retorcida y ri- zada, y otros aderezos, pues nada de esto se necesita para realzar la gloria de la Hija del Rey, que es to- “da interior ‘. Ni esto, ni cualquiera otra cosa por el estilo, es conforme con la verdad de Ja naturaleza, — cireunstancias y propiedades de la Virgen Maria, ad fué todo modestia, recato y virtud. Esta sencillez y naturalidad de la narracion, asi como una perfecta analogia entre la verdad de las cosas y su descripcion, seguiremos constantemente _ en esta obra. Maria Santisima es el modelo mas aca- _bado de todas las virtudes, habiéndola dado Dios al mundo para que fuese, despues de su Hijo, el ejemplo ~ que los hombres habian de seguir, si querian ser sai-' vos. En cualquiera edad y estado que consideremos su vida, hemos decomprender que su condicion so- cial fué siempre la pobreza; pero esta condicion tran- sitoria y accidental, en la vida humana, era el velo queencubria las grandezas divinas de esta Sefiora. Bajo esta gasa oscura estaban escondidas todas las gran- dezas de una Reina, y cuantas virtudes son necesa- Tias en todos los estados de la sp humana, La ino- q i a2 “ ‘Psalm. 44, v. 14.