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210 la presencia de Dios, la dijo el angel; concebirds y parirds un Hijo,4 quien llamards Jesus: este sera grande y sera lla- ‘mado Hijo del Altisimo.» ;06mo puede suceder esto, contesté la Virgen, pues tengo propdésito de no conocer varon? En esta primera parte dela embajada del angel y de la respues- ta de la Virgen, esta declara, que segun el curso ordinario de las cosas, nunca podria ella ser madre: mas todavia; 4 pe- sar de anunciarse 4 la Virgen, que su Hijo ha de levantar el trono de David su padre para reinar en él para siempre, ella lo renuncia todo, si para ello tuviese que faltar 4 su voto de conservarse siempre virgen, y np — varon alguno. En la segunda parte de esta emmbajaint: escade se des cubre ya, bajo qué titulo la Virgen pertenece al Espiritu * Santo. El angel descubre 4 la Virgen en toda su luz el mis- terio inefable de la Encarnacion; ningun agente humano tendra parte en esa obra fitera de ella misma; el hijo que ha de nacer de ella seré Hijo de Dios; y para que este portento se cumpla, el Espiritu Santo descendera sobre ella, y la vir- tud del Altisimo la cubriré con su sombra y hard con su omnipotencia que sin obra de varon, se forme en su seno virginal el cuerpo de su Hijo: el cual sera llamado Hijo del Altisimo'’. ; No se deavlices todos los denigiiios de la linasroate Trini- dad respecto de la Virgen, hasta que el enviado del cielo no hace patente la segunda parte de su embajada. Todas las - personas divinas han de poseer 4 la Virgen, y esta les ha de pertenecer; pero esta pertenencia ha de estar en armonia con el origen y procedencia, que tienen esas mismas perso- nas; al Padre que no procede de nadie y engendra 4 su Hijo, — ha de pertenecer como su Hija querida, porque la da este mismo Hijo, para que ella lo engendre en el tiempo, asi como él lo engendra en la eternidad: al Hijo que es engendrado y viene del Padre como de principio eterno, le ha de pertene- cer, como 4 principio de la nueva vida que va 4 tener: pues 4 Luc., cap. 1, y. 82.