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‘ 179 te sii dones celestiales. Por ti se han hecho cosas maravillosas, ora dignandose el Sefior pisar con sus pies esta tierra, ora biendo los hombres 4 fijar su morada en.los cielos. Ti eres oe leza y luz de los que caminan 4 Dios con felicidad> y como el zéfiro suave alos que caminan entre los ardores del sol, das aliento y -consuelo & los que suben al cielo. Tu ‘con- duces d los extraviados 4 buen camino, separas al hombre del infierno y. lo llevas al paraiso. A ti por fin se debe todo ek consuelo que recibimos en esta vida, y cudnta alegria ine- -fable se nos ha-de dar en la otra. «jCudnta belleza hay en esta doctrina! ; Qué ideas tan sublimes! {Qué palabras tan consoladoras! Razon tuvo San Isidoro para poner este razo- namiento en los: labios de los apéstoles, rodeando el lecho en que su Santisima maestra iba 4 dormirse dulcemente en los brazos de Dios. — : oy