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, CATÓLICA: 2 5 ¿E tra estas máximas dirige y. oculta sus insidias el Misterio de la novedad. Tambien aquella muger iba sentada sobre una bestia roxa , que tenia diez cuernos y siete cabe- zas. En semejante fisra se me figura. la libertad desenfrenada y sanguinaria, sobre la qual tiene su asiento la novedad , sostenida y aftanzada en aquel monstruo de siete cabezas , en que entiendo los siete Pecados Capitales. Hidra, salida del Lerna del Infierno; que fomenta los estragos y ruinas, se despeña y corre precipitada por todos los vis cios , sin temor , mi reserva , como lo previno la Sabiduríaa (m) por estas palabras: » No hay mas vi- ada que la “que ahora tenemos. Rompa por to- ¡do respeto nuestra maldad. No haya lugar re- ¿yservado A nuestra luxuria. Las; calles , las; casas, ¿,los campos, los jardines , y los 1montes: Ágros quo: E , et solitudines. meditabuntur , dice el Gran» | ino. Ñi paro, aquí su furor, Atropelles ¿mos al pobre, sojuzguemos la Viuda, no. res» »»petemos las canas. Oprimamos al justo, que quie- ¿ra oponerse A nuestros designios. Aquí no habe- , mos de guardar más Ley que la nuestra, ni mas =pjusticia , sino emplear quanto alcance nuestra fuer» za contra el próximo debil y enfermo.* > Tales son las voces que dan los Libertinos en la Sabiduría ; y “tales son las voces de la novedad ; sostenida de la libertad desenfrenada de nuestro-in- feliz siglo. Mas ¿quánta es la pena que me an- gustia,y el temor de que estos ecos de insipien- . , e pa .. he S.. - - (m) Sapiént, cap: +2, a , $ > p +34 ne sun A A e o a O

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