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turno , los que apropian á-los dias de la Semana ¿ pero Nuestra Madre la Igle- sia no los adopta , sino con nombre de ferias. Por Decreto de S. Silvestre Pa- pa, á excepcion de. el Domingo, dedi- cado particularmente á Dios en reconó- cimiento de su absoluta y suprema Do- minicatura , Ó Señorío; y el Sábado, dis- tinguido en la antigiiedad , y recibido en las Sagradas Letras. Así es pues ¡oh hombre! La. +A y amecrosa Providencia ordenó, que esos orbes celestiales. 1e. rodeasen , corteján- dote , y rindiendo su homenage como á Señor , para cuyo obsequio y ser “wicio fuéron criados + como. dice . el grande Gregorio: (g) Neque enim prop-= ter stellas homo , sed stelle propter ho- minem: facte sunt. Y. aunque .la tierra es opaca , ellos la iluminan 3 aunque .es tos- ca, ellos fomentan los planetas y los mi- neros. La. hermosean , y hacen visibles, tantas bellezas, y variedad deliciosa de colores. Distinguen los tiempos ,. orde- nan los años, señalan las horas , -arre- glan las noches para el reposo, y el dia -para el empleo. ¿Y (g) D. Gregor. Papa Bomil. 10; in E:VANE:

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