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A e CIMA RGIAR ara s E na EA El voto de la clausura es el muro que resguarda el caudal de estas virtudes sin riesgo de ser robadas. Ama mucho la clausura, obsérvala en cuerpo y alma, pues que aquél viva encerrado sirve poco si ésta es vaga. Finalmente, á un Director te rendirás voluntaria, segura que en todo tiempo por su medio Dios te habla. Serás en obedecerlz fidelísima y sin tacha: el que lo oye á Dios oye, y, el que no, á Dios agravia. Dale una exacta noticia de todo cuanto te pasa; séle fiel al darle cuenta, como que á Dios has de darla. Nunca te separes de él, porque serás engañada; que una oveja sin pastor los lobos la despedazan Su voluntad sigue siempre en cualquiera circunstancia, y hallarás en esta vida otra bienaventuranza. Procura ocupar el tiempo (1) en cosas que á Dios agradan, pues el que una vez se pierde nunca jamás se repara. Si es perdido todo el tiempo que en ociosidad se pasa, ¿qué será de aquellas horas que en crímenes se malgastan? Ocúpalo todo bien, mete el buen día en tu casa; ten entendido que á Dios no en todos tiempos se halla. Huye mucho estar ociosa, por ocuparte trabaja, ue la ociosidad fué siempre e las virtud+s madrastra. No apetezcas otra cosa que ser á tu Esposo grata, y huye toda vanidad, pues mucho le desagrada. Si lo mundano desprecias y por lo eterno te afanas, 348 LA VIDA RELIGIOSA serás de tu Criador el templo, mansión y estancia. De tu prógimo á ninguno reputes por cosa baja, mira la imagen de Dios en ellos representada. No le agravies ni desprecies, ni le pongas mala cara, que Dios contigo ha de hacer lo que tú con ellos hagas. Trata á todos con agrado, con ninguno seas ingrata; la gratitud siempre ha sido de la Caridad hermana Mas no olvides que en el trato has de ser prudente y cauta; guárdate de los del siglo aunque tengan muchas canas. Familiaridad no tengas con persona alguna humana; no te pares con ninguna, empero con todas anda. Dirige á Dios cuanto hicieres, tus obras así realza, que esto le dará incremento al mérito y á la gracia. Jamás contra tu conciencia, ni en materia la más parva, trates de hacer cosa alguna que tenga visos de mala. Tampoco, mientras que tengas duda prudente y fundada, por tí sola la resuelvas, si hay tiempo de consultarla Mas si el resolver precisa porque el asunto no aguarda, ide 4 Dios luz, y resuelve la ue al bien más se le adapta. Nunca de tí te confíes ni te creas iluminada; la que piensa eso de sí tiene la luz muy escasa Toma entonces el recurso al Superior ó Prelada; con esto quedas segura y tu conciencia en bonanza. Enseñar á otros no quieras, antes bien ser enseñada; que en portarte de este modo das ejemplo y euseñanza. (1) Tomado de los documentos que el Santo escribió en romance á la Madre María del Espirita Santo, religiosa del mismo convento de Santa Ana.