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276 “== De la Confesion ritorio. La delectacion es quando el pensamien< to se va intensando y creciendo mas con al- guna advertencia, aunque no del todo plena, entónces no es pecado mortal. Si pasa al con- sentimiento de tal suerte, que coneciendo lo que piensa, y que es culpa grave, se está en ello deleitando, entónceses ya pecado mortal: Si esta delectacion «se tiene con ánimo de pasar 4 la execucion , se llama pecado de pen- samiento consentido; pero si se está deleitan: do y complaciendo á solas con algunas memo- rias , ó imaginaciones y objetos torpes , Ó sean estos. respecto de sí mismo, ó respecto de otras as, sin ánimo de pasar á la execucion, pero con tal advertencia de que esto es culpa grave; y en medio de esta advertencia no quie- re poner los medios para resistir , ni apartarse ó desechar de sí esta delectacion con alguna santa y piadosa consideracion, ó alguna mor- tificacion, ú otro medio (como ya «queda pre- venido en el Tratado IL. cap. 8.), se llama de- lectacion morosa, y tambien es pecado mortal, En esto sucede lo que 4 uno que está junto al fuégo, y ve ó conoce que se le quema la ropa; Ó no quiere apartarse , yes conforme á lo: que dice- el Espiritu Santo : Qui amat. peri- culum:, in illo: peribit ( Eceli.:3=27.). Que «el que ama, esto.es, quiere , se está d permane- ce voluntariamente en el peligro , perecerá en él: Por lo qual debemos todos y todas hacer: mucha reflexion en este punto de delectacio- nes-morosas , para agusarse y emendarse.- Pa=