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272 - + De la Confesion apasionadamente : y de esta suerte te librarág de muchos pecados. Para esto te ayudará mu- cho el consultar y seguir-el parecer ageno, Esta advertencia es muy importante , por ser las pasiones inmortificadas las que nos ciegan las potencias y precipitan en muchas culpas; y así conforme á ella exámina tu conciencia si en algo has faltado para acusarte y emendarte, La segunda regla es , que puede ser una co» sa, aunque sea leve , pecado mortal , por con- ciencia enrónea y esto es, quando juzga inven» ciblemente y con error que peca , aunque no haya ley ó precepto grave que prohiba 6 man. de. Me explicaré con exemplares. Una persona en Domingo 6 Juéves haee jui- cio que és vigilia, y que le obliga el ayuno; si esta tal persona no ayuna , peca mortalmen= te. La razon es, porque no sigue el dictámien de su conciencia, que es la regla interior de nuestras acciones, y debe arreglarse á elle miéntras no sale de su error. Una Muger hace juicio que siempre que con- fiesa ha de decir un pecado mortal que come- tió en la. niñez, aunque lo haya confesado mu- chas veces, y si no lo hace, le parece comete un sacrilegio. La otra tiene un sueño torpe, y no dió ántes causa, ni se alegró despues ya despierta, y hace juício que ha pecado. La stra doncella -ó-muger honesta , 4 quién:pro= vocó un mal hombre, resistió ficlmente, y no quiso consentir; pero despues hace juicio .er- róneo que pecó gravemente, y con aquel ru-