BCCPAM000539-3-27000000000000

NAAA mue. > 196 . “De la Confesion dad; y estando prontos ú ayudarles en lo que mias necesitaren. Verdaderamente que quando se ve proponer cn un lagar una Visita, y leer en los púlpitos con tanta autoridad aquellos ca- vítulos € instrueciones , exhortaciones , súpliz cas, amenazas, y lo demas tan bien parlado de los Notarios, parece ha entrado la redencion en aquel lugar; pero-quando se ve que á pocos dias se ausenta , y se-queda todo quizá como se estaba , causa gran desconsuelo. Tienen mu- cha culpa de esto los que no dan cuenta al Visitador. Hay muchos que murmuran con libertad de la honra del próximo, y saben su culpa y escándalo; pero en llegando á que hayan de decir la verdad-á quien viene á re- mediarlo, callan: con que para esta impiedad se aunan muchos con pretextos frívolos, y así son quizá causa de que se continuen los es- cándalos y pecados. Allá preguntaha- Dios á Cain que adónde estaba su hermano Abel; Y respondia: ¿Por ventura soy yo guarda de mi hermano? Pues ven acá, malvado: ¿fuiste capaz de quitarle la vida , y no eres capaz de decir dónde está? Así hay muchos que con su perversa lengua quitan honras 6 murmuran sin compresion de las flaquezas de sus próximos, y en llegando una” visita (sea en-el estado que fuere , que eon todos se hubla ) callan, y así ño remedia nada; con que deben temer ser reos en el juício divino-de las culpas y escán- dalos que se continuaren. Los señores Curas pueden remediar mucho,

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz