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y Cómunión. Trat! YIT. 187 cuse valerse (6 en todo ó en lo mas) de otros, pero con dificultad se hallará, y no sabemos como pasarán delante de Dios las razones qui- tí de autoridad , descanso y de otras, que acá se justifican com el mundo. El buen Pastor busca y lleva sobre sus hombros la oveja des” carriada y roñosa: el Médico “visita al enfer- mo; y el padre recibe al hijo pródigo. Así los señores Curas han de procurar acomodarse ú la necesidad de sus feligreses, como" Pastores, Médicos y Padres de almas, ganándoles el corazon , y disimulando $us flaquezas , sufrien= do sus genios, y tal vez sinrazones, nacidas de poca luz, talento $ jenorancia , siendo pa- ra todos universal, y un iris dé paz. ¡Oh , se- fñores Párrocos! Pues las pobres ovejas madri- gan, se desvelan y -pasan frios para cuidar de los brutos que han de cultivar y regar la tier- a que ha de dar el diezmo y la primicia, pa- sando quizá can un pedazo de pan negro y un pimiento, y la otra pobrecita se levanta ántes de amañecer para amasar el pan que ha de ser- vir 4 la ofrenda; madrugan tambien los Pas- tores que lo han de percibir y comer, y apro- vecharse de este esquilmo , pagándoles en lo espiritual. Si no se aprovecharen suya será la culpa. ¡Terrible cargo y cuenta os aguarda, señores. ! Es tambien importantísimo , y les será de grande alivio y descanso en su obligación , el que procure introducir en donde heya opor- tunidad -la* escuela de Christo. que entrando y +] l E lee a