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i es - 305 is imagen misma de Cristo, caminando de eionised, ancien’ aumentando cada dia las virtudes ‘. ; El mismo. Apéstol explica con abninabth olarididy saa = el principio de esa regeneracion, cual su objeto y cual su fin, constituyendo el primero en la pura bondad divina, el segundo en los adelantos en Ja virlud, y el tercero en el complemente de la santidad, en el grado ultimo a que el hombre puede lle- gar. Por pura gracia, dice, habeis sido salvados por medio de la fe, y esto no viene de vosotros, siendo como es un don de Dios , sin que hayais podido merecerlo. por vuestras obras, para que nadie se glorie *, Por esta causa doblo mis rodillas ante el Padre de nuestro Sefor Jesucristo , para que segun las riquezas de su gloria, 0s conceda por medio de su Espiritu, el ser for- tificados en virtud en el hombre interior *, a fin de que podais comprender con todos los santos, cyal sea la anchura, Ja lon- gitud, Ja alteza y la profundidad,y conocer tambien aquel amor de Cristo, que sobrepuja 4 todo conocimiento, para que seais plenamente colmados de Dios ‘. _ No puede darse explicacion mas clara: del principio de la vida interior del alma, de sus adelantos y de su consumacion. El hombre es llamado misericordiosamente por Dios, para que viva unido 4 El en esta vida por Ja gracia, para que crea en El, lo conozea -y lo ame, y despues reciba-esta union su complemen- to perfecto en la gloria. Y como el conocimiento de la naturale- za infinita por un ser limilado tiene principio , implica necesa- riamente el progreso paulatine del mismo, hasta llegar a lo que San Pablo llama e/ dia de Cristo *; es decir, hasta llegar al dia en que cada uno es juzgado por Cristo, y el alma justa entra en el goz0.de su seiior. Y corre la misma paridad elaamor. El alma is tenido princi- ' 2." Cor. cap. Hl. v. 18. ¢ Id. vy. 44. 2 Ephes. cap. Il. v. 8. 9. * Id. v. 18)A9, ¢ * Philip, cap. 1. v. 6,