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—15—_ Nueva York, donde se estd fabricando, hace ya quince aos, una catedral que rivalizara en riqueza y hermosura con las mds notables de Europa: unos hombres, que no sa- _ben que hoy dia los ocho millones de catélicos que viven allf ejercen la mayor influencia en los destinos de aquel pueblo, tan adelantado en la industria, y tan abundanten riquezas : unos hombres que dicen, que la Iglesia romana se ha impuesto entre nosotros la triste mision de eaxtinguir todas las luces, de protestar contra todo progreso, cuan- do todos saben que en Roma es precisamente donde exis- tian los mejores institutos literarios , donde florecian como en su origen y centro todas las artes liberales , y donde hoy mismo existe el astrénomo mas aventajado y el mejor co- nocedor de las afecciones atmosféricas , el Padre Zechi, dis- c{pulo del Colegio Romano, cuyos inventos y aparatos se ven hoy en todos los observatorios de Europa y de América: unos hombres, que nada de esto saben, no merecen llamar la atencion de nadie. Hablan: pero sus voces deben repu- tarse por sonidos que forman ciertas aves que, sin tener acto reflejo de ello, y sin entender lo que dicen, repiten algunas palabras que se les imprimen 4 fuerza de oirlas. Pues bien: los que en pleno siglo décimonono repiten las cosas que han publicado los llamados pastores protestantes, - hacen cuanto esta de su parte, para que, sin que tengan derecho 4 quejarse, se les pueda decir que hablan como esas aves, que se conocen por el nombre de urracas y co- torras , que articulan ciertas voces, cuya significacion esta en la mente del hombre que las oye, no en el ave 199 las articula. - Damos 4 cada cual su honra: pero al dilucidar lo que es la polftica verdadera y la falsa, no intentamos dar impor- tancia 4 los llamados pastoies ni 4 lo que han dicho como resultado de su sarcdstico sénodo. Escribimos solamente porque amamos la verdad , y aborrecemos la mentira.
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