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aie Baienw formes con la palabra de Dios, tnica regla obligatoria para el hombre, miéntras que las doctrinas y practicas de los romanistas son contrarias 4 ella, por lo que inducen en er- ror 4 las almas, seguirémos anunciando solo 4 Jestis, ver- dadero Redentor de los hombres y de los pueblos, en la contianza de que_merecemos la aprohacion.de Dios, y de que tambien vendrda un dia, quiz4 no muy lejano,,en que los descendientes de los mismos que hoy nos ultrajan.y per-. siguen, confesardn que los cristianos evangélicos. espaiio- les del siglo diez y nueve, merecieron bien de la peatia, yde la humanidad.» Como, se. ve, no. pueden decirse mayores desatinos en tan ‘pocas lfneas. Es tiempo. casi mal-empleado el que. se gasta en confutar esas yerdaderas insulseces , pues.son.las mismas que propalaban hace ya tres siglos los primeros pro- testantes, las cuales han sido pulverizadas por mil sabios, habiendo, ademas, el tiempo tomado 4 su cargo el demos- trar que si los protestantes las. repiten hoy, es porque no son ya simplemente protestantes, sino indiferentes , ateos y. paganos, con el sobrenombre falso de cnistianios. Pero son soldados de Satands, y tienen que-llevar armas, y estas armas son siempre las mismas; la mentira, la calumnia, la supercherfa, Por esa razon no creemos necesario ocupar el tiempo en una refutacion. Pero los pastores, que tanto blasfeman en su papelucho sindédico, aparentan que tienen entraiias de piedad para con la Espafia, 4 la cual llaman 4 boca. llena nuestra Espafia, lo que es tan ridfculo como todo lo que han dicho. Léanse , nada mds, los. nombres de una parte de esos pastores , y se comprendera si tienen derecho 4 lla-. mar suya 4 la naciop que no les did el sér., Los ponemos aqui tan solo para salir por la honra de Espaiia, pues una honra es para ella el que, al oir esos nombres, diga: Yo . no soy de esos ectranjeros: esos, no son hijos mios,. son wnos advenedizos. Oigase como se llaman; Moore, Ruel, Jameson, Scharf, Eximeno, Tudury; estos no son espa-