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AL SS, CHRISTO DEL DESAMPARO. gor él hacerlo. ¡O: y cómo se verifica 4' la letra en esta ocasion lo que dice David hablando con el Padre : arrojaste de tí, despreciaste al que es Christo , ó ungido cuyo (a): demoliste y echas- te por tierra sus cercas, guarniciones y defen- sas, sin dexarle otro fundamento y “apoyo que el miedo y la desolación: apartaste tu socorro, y no le auxiliaste en manera alguna en su com- bate y pelea : cubristele “de confusión, dindo lugar 4 que sus enemigos se regocijasen y tfiun- fasen sobre él asu satisfaccion, No estraño que el Salvador reducido 4 tan apurada constitucion y “estado diga por boca del mismo Profeta; »mi alma se encuentra llena de “males, y TMiévida, yeccina” y próxima al infier- eno. (b). Esta expresión ño pudiera aplicarse sin imipropiedad 4 los máles del uerpo”, “que solo hieren 4 este, incapaces de penetrar y tocar al alma, esto es, 4 la parte espiritual y superior de ella , como nds "lo dixo el mismo Señor (c), exortándomos á que no temamos y despre- ciemos los *rfñiales que puedan hacernos los hom= bres , que por mas que se enfurezcan , irriten y armen contra nosotros , no pueden tocar ni TOM. 1. EEE he- (a) Psalm. 88.30. 8z seg. (b) Psalm, 87. 4 (c) Matth. 10. 28.