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> MT E A ES TS E AL SS. CHRISTO DEL DESAMPARO. 389 pado y reo, no como quiera sino en el grado sumo ¿ con un Exceso infinito 4 todos los hom- bres que le precedieron y subsiguieron. La pe- na, la aficcion, el castigo debe ser proporcio- nado 4 las culpas y á su gravedad : la ira € in- dignacion del Señor tampoco tiene otra pauta ó nivel; y como en Christo se estrenó en toda su plenitud y aerribilidad , tenemos necesidad de reconocerle por el mas culpada. Tenemos, digo, precision de reconocerle con Isaías como un le- proso (a), humillado y herido por Dios; quiere decir , cubierto, no de llagas, sino de crimenes, de que la Jepra era figura. Ved aquí ya delinea- do con los mas vivos y propios caracteres el desamparo de que se lamenta en voz alta y terrible Christo, Yo lesconsticuyo , conforme á la idea propuesta, y 4 lo que arroja de sí, y nos suministra la meditación del quinto día, en el reconocimiento de las culpas de todos los hombres que tenia sobre sí; en el pudor y con- fusion. que de aquí le resultaba , que en frase d- Dwvid cubria su rostro (b), sin atreverse 4 le- vantarle 4 su Eterno Padre, que sabia le miraba co- mola víctima del gónero humano , cargado de to- dos (a) Isai. 53. 4. (B) Ps. 68. 8,