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Quexas de Dios febre cinco locuras delos hombres: 266 dixo á dos que ivan con él: idos de aquí, que yo no me quiero poner elle Habito: y dichas ellas palabras clptró, con tan manifieftas (eñales de —. fu erera condenacion. Pues fi por dexar las devociones de algunos Santos, caen algunos en pecados , y En € l imfierno; los que dexan las de Nueltra Señora, con mayoP Pazo Refiere Jacobo de Bor cala junto al Camino embiado de Dios para llevarme a elte Capitan el primer día que de- xalle de rezar 3 fu Santilsima Madre una devocion.que todos los dias le. reza 3y en catorze años que ha que eltóy aquí, nolaha dexado por ello n le he quitado la vida, y llevadome fu alma. Mandole, que fe fuelle de alli, y el fe fue , dexandolos a todos allombrados del cafo y y con eltole enmendo el Soldado, y en adelante vivió como muy buen Chriftiano. en ee ' | AT E oe Se El Padre Fray Alonfo Fernandez refiere, que defeando Santo Do- mingo convertir en Iralia á un Capitan de ladrones, fe fue A bulcarlo, Lib. de y no pudiendo reducirlo dexar fu mala vida, configuió que rezafle Ro/ar, cada dia el Rofario. Y á poco tiempo de como lo hizo, le dió un pagar fimo, y jesgandelo por muerto fus compañeros, lo enterraron €n él campo. Al cabo dedosaños paíso por alli Santo Domingo, A quien la- . moel difunto ; y abriendola tierra, fe confefsó , y Je dixo, que alli le avia confervado nueftra Señora la vida, por la devocion que le avía te- nido, y que avia padecido alli gran Purgatorio ; pero que yA con la con- felsion fe va á gozar de Dios, | 5 Afirma Celario , que junto A la Ciudad de Trento huvo un [amofo Cefar: ladron , que hazia con Otres muchas muertes , y robos. Encontró este /ib.7, €. áun Reli iofo , que con y cions Refpondiole, que fi, ero que Aus culpas eran tantas, que yino e pro o osdaré uno, y es, que ayuneis todos ¡Sabados en reverencia “de Nueftra Señora, y que en tal dia no ha- pas mal 4 nadie. Ofrecio el hazerlo, y lo cumplió : y faliendo delpues os de Trento 4 correr los ladrones un Sabado,como tl eftava (in armas, como en tal día hazia, le prendieron, Je cortaron la cabega, y lo enter- raron en el campo. Aquella noche las guardas de-Ja Ciudad vieron luzes fobre fa fepultura , y A cinco feñoras, A a i y e rt . A + E LS $ Y <A e. £ 7 pr E ” , de A, » 5 ” ds CS libertad le dixo, fino temia fu condena 56,