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Dra QUARTO: 305 pocos los males que provienen del mal exemplo? Pues acabemos. Verdad es de fe que el que perdió una al, ma la ha de pagar con la suya. Mire cada uno su Com: ducta : considere los pasos de su vida, y si en ellos encuentra que ocasionó la muerte espiritual de algu- na alma, nohay remedio, una de dos, ó infierno eter- no, ó una penitencia de por vida : ó-llorar, suspirar, gemir, afligirse, ayunar, orar y mortificarse hasta -la muerte, Ó contarse entre los muertos sempiter- nos. En una palabra, ó mudar de conducta, ó al “infierno. Carísimos padres y señores mios + parece que . el zelo que me consume, me hace olvidar de la respeta- ble presencia de tantos exemplares Sacerdotes como -me escuchan; pero no señores. Vosotros pensais como yo, lo sentis como yo, lo llorais y gemis como yo de- lante de los cielos y la tierra, y sabeis muy bien que cescandalizar un Sacerdote á una alma , y tal vez á una.alma pura, á una alma inocente,¡4 una alma por quien Dios derramó toda su sangre, es un crímen tan enorme, que para clamar debidamente contra él, de- beriamos hacer estremecerse los cielos, temblar la quando eos quos ad aliorum correctionem posuit , dare exem- pla pravitatis cernit, quando ipsi peccamús y qui bc. Homil. -«XwYH1'SUp. Evang. Qq2