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Dra SEGUNDO. 11 y comodidades para proveer á los ministros de un Dios crucificado de abundantes conveniencias que empleasen en regalos, cónvites, galas, juegos y otras superfluidades que ellos mismos.creen no serles per- mitidas + Ocupais al mismo tiempo: los puestos, y go- zais las rentas de otros ministros idóneos que hubie- ran servido útilmente'4 la Iglesia: la privais de aque- llos obréros fieles que la hubieran consolado con fru- tos de salvacion, que la hubieran ayudado y honra- do con.sus talentos ;;en vez de.que faltándoos á vos otros , porque Dios que no os llamó, tampoco os los ha dado , no podeis servirla sino de molestia y des= honra. La pureza de intencion con que se debe. .subir,al Sacerdocio es la tercera señal; y 4 la verdad una de las mas principales de .la perfecta vocacion. Orde- narse con esta pureza de intencion , es no pretender, en el Sacerdocio ótra cosa que el honor de Dios, des- tinándose perpetuamente á.su santo servicio, entre- gándose todo para el bien de sus hermanos, y pro» veyendo á la Iglesia de un nuevo ministro que la sir- va:-Mirad ahora, venerables oyentes mios , si podeis salir por fiadores de la pureza de. vuestras intencio- nes. No será necesario un prolixo exámen para co- nocer desde luego quales sean. los :fines que traen á la Tglesia lama yorsparte,de sus ministros, siendojlos Tom, I, V