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338 Discurso mercio crece , su agricultura se fomenta , y la po- blacion va siendo cada dia mas numerosa ? ¿ No será útil para vosotros empezar por donde ellas em- pezaron ? ¿Las sociedades patrióticas á que ellas deben su principio y sus aumentos, dexarán de ser para vosotros lo que para ellas y para todos han sido ? ¡ Ah! Sino sois rebeldes á la luz : sí no os obstinais en negar las evidencias y demostraciones, vivo persuadido 4 que convendreis conmigo en la utilidad del establecimiento á que os exhorto; pero podreis decir que aunque su utilidad se toca, os amedrentan las dificultades que se presentan para llevarle á execucion. No tardaré en desengañaros, haciéndoos ver su grande facilidad en esta e SEGUNDA PARTE. Un pensamiento , señores, para cuya execucion se cuenta con la proteccion del Monarca , con el exemplar de muchos o pie: con facilidad le practicaron, y que 10 ne . de exquisitas : tosas máquinas, largos y penosos viages, ¡tos enor- mes y excesivos , no puede ser dificil. Un pensa= miento , vuelvo á decir, de esta naturaleza convi- da con su misma facilidad á la execucion. Tal es el establecimiento de una sociedad patriótica. + Nosotros vivimos en un siglo (diga lo que quiera la malignidad, la preocupacion y la envidia) en que por una particular gracia del Padre de las mi- sericordias y Dios de toda consolación, nos gobier- na un Monarca lleno de amor para sus vasallos; le- no de pensamientos nobles y heróicos porel bien temporal de su reyno, y lleno de piedad y religion por sus eternos intereses. Su amor enternece su pa=. ternal corazon, y le desvela : sus vigilias le ofrecen altos pensamientos, y su religion le hace presen= tarse como exáctísimo modelo de todas las virtudes.

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