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Á LOS SEÑORES DEL AYUNTAMIENTO. 32% tem spiritus in vinculo pacis (a). Si el amor natural sufre las importunidades del enfermo , como vemos en una madre con su hijo, en una hermána coñ -su hermano doliente, ¿con quánta mas razon el amor espiritual deberá sufrir y sobrellevar con pa- ciencia las importunidades y flaquezas de nuestros «próximos enfermos ? Y mas si nos acordamos , como decia San Agustin, que este oficio no ha de durar para siempre , porque en la otra vida no habrá que sufrir, ni que sobrellevar á nuestros hermanos : su- frámoslos , dice , en esta vida , para que merezca- mos alcanzar la eterna. No perdamos, señores, la ocasion. El trabajo es temporal , y el descanso será eterno ; observemos las cosas que Dios nos manda en la tierra, y ie las o 2 él nos 2.el : cielo, +»: Dios nos manda temer e. Femtmosíe -con un te- | mor. santo. q. ños. aparte del mal y haga obrar el bien: huyendo de los vicios y practicando las virtudes : observando su inmaculada y divina ley, y procurando que nuestros próximos la observen: creyendo sus verdades, adorando sus misterios, obe- deciendo á sus preceptos, recibiendo bien sus sa- cramentos , conformándonos con sus disposiciones, esperando sus promesas, amando su bondad , y te- miendo sus castigos. Deum timete. Dios nos man- da obedecer al Rey , honrar al Rey, y á quan- tos e roer le representen. Obedezcamos á sus heyes,á sus decretos y determinaciones , sea que tengan por objeto los bienes temporales de la mo- narquía, sea. que miren los bienes espirituales de sus vasallos: diríjanse á acrecentar las rentas Rea- les, 6encamínense al aumento de las virtudes: sea nuestra obediencia pronta, universal , meritoria, (a) Ep. Pauli ad Ephes. c. 1v. v. 2.
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