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peL Braro BERNARDO DE Oria. 235 vísios por ir 4 gozar de Dios: por la inteligencia de los secretos mas ocultos del corazon humano, que descubria á las: mismas personas quando era volun= tad del Señor, y. convenia á la salud de sus almas: por su humildad tan profunda, su mansedumbre in- aiterable-, su. virginal pureza, su mortificacion tan rígida, su fe: divina tan viva, su esperanza t n fir- me, su caridad tan heróica, y su celo infatigable por la gloria de Dios, y la salvacion de sus próximos, Todos estos bienes, todas estasgracias del Altísimo se le multiplicaron prodigiosamente enel alma por ne- garse ásí mismo, tomar su eruz , y seguir á Jesucris- to obedeciéndole en sus preceptos, obedeciéndole en sus consejos, y obedeciéndole en sus divinas y bene- rables inspiraciones. Bernardo podia muy bien decir con toda verdad : Yo 2 cas poa EY mi Pa- dre: yo obedezco como debo al Criador y 4 las cria- turas: Sicut mandatum dedit mibi Pater, sic facio. Excelente modelo, amados mios, tenemos á la vista para nuestra edificacion. El, 4 la verdad , era de la misma naturaleza que nosotros, de la misma . carne frágil y miserable que nosotros, vivia en el mis- mo mundo que nosotros, y sele socorriía con losmismos auxilios espirituales que á nosotros. El mismo Dios tenia Bernardo: la misma Iglesia , los mismos Sacra- mentos, la misma fe, la misma religion fue la suya que la nuestra. Si él pudo y quiso, valiéndose de los socorros de la gracia, reanimar su débil naturaleza para observar los preceptos del Señor, tambien po= demos nosotros . Si él por llegar á la perfeccion usó de los socorros que la santa Iglesia l e pro porcionaba en los Sacramentos, en la oracion, Ó6.en los sermo- nes, y con ellos se propusoobservar, y efectivamente observó los saludables consejos evangélicos; lo.mismo podemos nosotros. Si él recibia atenta y devotamente las divinas inspiraciones como dones inestimables del | -¿d Cg 2