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Dr San CAYETANO. J exemplar , entregarnos en los brazos de la Provi- dencia de Dios para que su Magestad nos enca= mine segun los designios de su adorable voluntad? Que resta sino que procuremos vivir pacíficos, humildes,-castos, sóbrios , aplicados al trabajo, cui- dadosos de nuestras casas y haciendas , misericor- diosos con nuestros próximos, y religiosos con nues: tro Dios; y así seremos verdaderamente felices so- bre la tierra, como lo fue San Cayetano. Pobres viudas: podeis ser felices llevando con paciencia vuestra pobrezay desamparo. Pobres huérfanos: po- deis ser felices buscando á Dios por padre vuestro, conciencia las fatigas que sufrís en esos on racticaba San Isidro en vuestro -exercicio, y lo hacia San Cayetano en su respectivo ministerio. Hombres ricos, á quienes el Señor ha concedido bienes de la tierra : podeis ser felices usando bien de ellos, exercitando la mise- ricordia con vuestros próximos , manteniendo en paz á vuestro pueblo , evitando los litigios que tanto deterioran los caudales y tanto gravan las concien- cias, y mostrándoos en todo hombres de bien y ciudadanos útiles. -- _ Venerables Sacerdotes : podeis ser felices resi- diendo en vuestras parroquias, y siendo un todo para todos en sus necesidades espirituales y corpo- rales: dando doctrina 4 los ignorantes en nuestros Católicos dogmas y en sus respectivas obligaciones: consuelo á los atribulados:con las frecuentes tenta- ciones del mundo, del demonio y de sús pasionés: aros la paz en los matrimonios desavenidos Inquietos por la diferencia y contrariedades de los genios 6: por la perversidad de susicostumbres: socorriendo á los necesitados y hambrientos: vis- Ca

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