BCCPAM000538-4-27000000000000

210. SzrmMON - XIII. ( y sacrificando á su amable hijo Isaác. Esta preciosa virtud resplandeció maravillosa mente en Josué, cé. lebre Capitan del pueblo Hebreó, que no traspasó un tilde niuna jota de la ley que el Señor le habia dado, sin embargo de contener centenares de preceptos di- f íciles ciertamente , y ásperos en la execucion. La obediencia formó de: los dos Tobías, padre é hijo, dos ciudadanos virtuosamente perfectos; y. ella, en fin, se vió en la mayor altura en la persona de Jesuerist: 0, que baxó delcielo á la tierra, no para hacer su volun- tad , sino la de su eterno Padre que le enviaba: que apareciendo entre los hombres lleno de gracia y de virtud , obedeció , como dice el santo Evangelio, á María Santísima su madre, y á su purísimo esposo San José (a); y que finalmente, si entregó su vida á la muerte , y muerte de cruz por la redencion del mundo, fue por la obediencia. Virtud preciosa que justificas al pecador, premias al justo , coronas al be- nemérito, y colocas en la bienaventuranza á todos los predestinados. Sí, ama o mio: la obediencia levanta al hombre á la. participacion de la divinidad, y la desobediencia transforma en demonios á los mis- mos Angeles. ¿Seria justo, decidme,, que la santidad. de esta doctrina 'se amancillase con la terca resistencia de mi conducta? ¿Convendria acaso que yo alegase mi insuficiencia, la debilidad de mi salud , el tránsito casual por esta ciudad, y sobre todo la falta de pre- paracion para hablaros desde este púlpito con la ma- gestad y energía que justamente exigís en los que os: . «anuncian la palabra del Señor, y que dexase sin efec- to-el mandato de vuestro respetable y virtuoso supe- rior? Ciertamente , señores mios , que nó. Mis excu- sas podrian aparecer razonables, pero nunca serian (a). Luc, c. Ele Ve 5 Lo

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz