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e id OA A A A ue POE ar e A 2 Py 2, A A ajo ARMA 0 a DATO LA TAG E Et nd ra oi La pas dial dor y yd 07 DI GA ie AA la abund lancia de toc OS Z _tidos en no pecar por exceso ,¡atribuyendo. á los San= tos los beneficios que recibís del Señor. Esto nos lo TEE E a ás e yd pen 176 SerMON XI. tos que reynan con Cristo en la gloria? Si los hereges quando suplican á sus Soberanos ó á sus Magistrados, estiman por acertado buscar un personage ilustre que apoye sus pretensiones, y haga valer sus súpli- cas, ¿por qué nosotros haciendo esto mismo con los Santos del cielo hemos de ser reprehensibles? ¿No veis como no van consiguientes en su modo de pen- sar ? Pero no es extraño : si pensáran con uniformi- dad no se apartaran de la Iglesia Católica, Apostó- lica Romana. Por lo que vosotros, 4 quienes Dios nuestro Señor ha hecho la singular gracia de coloca- ros en el centro de la religion, sed constantes en vues- tra fe, creyendo firmemente que es bueno invocar á los Santos, porque ellos saben , quieren y pueden re- mediar vuestras miserias. Lassaben, porque las yenen el espejo clarísimo dela divina esencia : quieren reme- diarlas, porque su caridad esincomparablemente ma- yor en el cielo que. la que tenian en la tierra; y. pue- den remediarlas, porque -si 3 aun que ado. vivian en este valle de lágr podían favorecernos, ¿quánto mejor ahora que se hallan en la gloHa tE : GE endid A á los Santos, invocad á los Santos en todas vuestras necesidades y apuros. Clamad á los Santos, para que os alcancen de Dios el remedio de todos los males y s los bienes: Pero estad:adver- enseña la fe: Oímne donum perfectum desursum est, descendens ad Patre luminum (a): quiere decir, que todo dón perfecto de gracia, de naturaleza ó de glo- ria viene de Dios; y así 4 los Santos solo les debemos estos dones en quanto nos los alcanzan del Señor, en - quanto le piden y ruegan que nos los conceda. ¿ Lo babel entendido? pen no 19 equivoquela.. ecaro ,». ps 4 . é . ye 15 e 4 ; Y SIA (a) Jac. C. I, Y. 7 , : | E 0 + OP