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$ vino jamas alabado bastantemente de me SERMON l. apetitos para entregarse 4 todos los placeres de la vida , por mas probibidos y criminales que sean; pero luego la divina Escritura levanta el grito, y con una voz de trueno les dice de esta manera: esto. pensaron los impíos , y lo erraron : su malicia los cegó para que no viesen la santidad de Dios, la pureza de su ley , y la maldad desu pecado (a). De suerte, amado pueblo mio , que la felicidad del hombre no consiste en las riquezas, ni en las con- quistas, ni en la. adquisicion: de las ciencias na- turales, ni en los grandes empleos , ni en los pla- ceres criminales de los sentidos , ni en otra alguna de quantas ideas pueda formar el hombre desnudo de la fe, perosila razon humana escucha la voz de la religion , luego encuentra la verdadera feli- cidad. Inmediatamente el Evangelio cra di- os hombres) nosenseña que podemos y debemos ser felices ; por- que podemos Y debe S JYIMPIOS | aAZON p? que seamos dignos de ver á Dios para siempre (b).: + Podemos. ser pobres de espíritu, y será muestro el reyno de los cielos. Podemos llorar nuestros pe- cados, y serémos eternamente consolados. Podemos usar de-misericordia con nuestros próximos, y la usará Dios con nosotros. Podemos ser pacíficos, y serémos llamados hijos de Dios nuestro Señor. Ved ahí, amados mios, otros tantos hombres felices. Y 4 la verdad, Dios nuestro Señor no nos habia de haber dado este deseo tan vivo y tan innato.en nuestras almas, para tenernos mortificados.con él toda la vida. No señores. Podemos y debemos ser- felices, y lo serémos infaliblemente si. constitui- (a) Hec cogitaverunt , et arraverunt : excecavit enim illos malitia eorum. Sapient. C. ll. V. 21. | (b) Div. Matth. c. v. v. 8,