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DE SAN JosEr. 67 tancias, igualmente se concede 4: todos los mansos y humildes de corazon. A pesar de la sublime dignidad de esposo de María Santísima , y ¡padre de Jesus, hu- biera sido abandonado á todos los rigores de laídivina _ justiciay y entregado á los tormentos «eternos, si le hubiera asaltado la muerte envuelto entre iras , sO- berbias , altanerías , enconos,e amd , Ú otras pa- siones mas -vergonzosas é inmundas. «No equivoqueis mbres de las cosas. “San Josef no consiguió el' reyno de los cielos porque tuvo'este ú el otro minis= terio sobre Dry pa por u > el 4 p Li y) exé Crta Iincat con las obligaciones del casgo en, que le colocó el Se- for , manteniendo por su heróy bre la paz y buena pc Jidximo la gracia y fa- miliaridad con Dios; y consiguiendo por premio de sus virtudes la corona de la gloria: Mansuetudo babet pacem... Que es lo que al principio OsESO para modelo de vuestra mansedumbre. é No resta por conclusion otra cosa sino repeti- ros la. “obligacion QATAR. de imitar. al Santo en esta excelente “v -si--pretendeis su patrocinio en la vida , y su amparo en la terrible hora de la muer- ee. Y quando no querais ser mansos y humildes de corazon so dmnicaR de o«Jonás aa arios. Las de la m: e LS y Has ve- reis inquietas -ps soberbias , iracundas, mal avenidas con sus próximos , enemigas del mis- mo Dios , desterradas de la gloria, y en estado de- plorable é infelicísimo.- Por-el «contrario una alma humilde y mansa de corazon á todos es amable, á todos. ipradeble 4 Dios ,á los Angeles y 4 los hom- bres : vive pacíficamente «con sus próximos, trata fa- miliarmente con Dios , y espera en breve poseer el reyno celestial. Mirad , vuelvo á deciros , qual de es- tos dos estados os parece mas razonable , y tratad de proporcionaros con él , miéntras que yo a. 12.