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| ballo abre en la tierra DE SAN NORrERTO. 267 chadme con toda atencion, y os lenareis de asombro, -Sale una tarde 4 pascarse desde la corte al lugar de Freden magnífica y ricamente vestido , montado en un _brioso caballo en compañía de un criado.de satisfac- cion , llevándose las atenciones de quantos ponian los ojos en un jóven tan bizarro : caminaba Norberto, co- mo. otro Saulo, lleno de vanidad y orgullo sin acor- darse de Dios ni de los designios de su adorable Pro- videncia, que iban á verificarse sobre él en aquel mis- mo momento , quando de repente se cubre el cielo de - obscuridad , «se condensan horriblemeute Jas nubes, silvan furiosos los vientos , travesean fogosos los re- lampagos . , y los mas espantosos - truenos hacen estre- mecer á los hombres. Norberto, sin embargo, sigue su camino , rompiendo por una tempestad tan desecha, hasta que rasgándose una nube arroja sobre él un for- rayo, el qual dando 2. Junto. á los pies de su ca- precipitado, Queda ato ondrado el cria tendido en aquel campo, y pst Pe 21m Y añadiéndose pavor á pavor, y espanto á espanto, cércales á todos tres una espesa niebla , y oye desde ella la terrible. voz del Señor aus. le dice al corazon de esta manera: A ¿Qué haces Norberto, qué h -me »persigues? ¿Por qué abusas de mis dones y mis mi- »sericordias sobre tí , haciéndolos servir á tu orgullo »y vanidad? Yo te envié al mundo para que con una »vida irreprehensible fueses el reparador de mi Igle »y has venido á ser por tu arrogancia y p y : vpiedra de tropiezo en las costumbres , y el escándalo »de la ciudad. Vuelve Norberto atrás , detente , no »prosigas en los vicios.” Todo mudado Norberto por la mano del Omnipotente, levanta al cielo los pjos lle- nos de lágrimas , y dice: »Señor, Señor , ¿qué que- »reis que haga? Huye del mal (le respoendiéron al » interior ) huye del mal, y executa el bien: busca : la z , pa >

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