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92 ( SermoN VÍ, | conocimiento del misterio que en ella se habia de obrar: sabia, como dice San Agustin, que los mismos pe- cadores eran el motivo de que fuese elevadaá tan alta dignidad : sabía, que si el hombre la debia de algun mo- do su redencion, ella era: deudora al hombre de su ma- ternidad divina. Si no hubiera habido pecado , tampa- co hubiera habido redencion; ni hubiera sido madre del Redentor si no hubiera habido pecadores que- re- dimir. Por eso desde entónces miró á su Hijo como víc- tima del mundo; y 4 sí misma como Madre , como - Abogada y Protectora dé los pecadores. En su parto dió al mundo 4 la misma Misericordia , como se expli: ca San Bernardo , y consiguientemente conoció que el afecto dominante de su corazon había de ser siempre da sin pecado original, instruida en la divina ley , lle- na de todas las gracias , adornada. de.todas las virtu- des , sabia aun ántes de concebir á-su Hijo quanto de- pa : le y 1 eb 0 .p - cian las divinas Escrituras de la. venida del Mesías, quanto habian vaticinado los Profetas , quanto habian suspirado los Patriarcas;, quantos' simbolos y figuras habian precedido en la antigua ley;. y toda enarde- cida en el amor de los hombres , gemía con lágrimas tiernísimas pidiendo la venida del R edentor; desbac ía- se en suspiros. los mas profundos : abrasábase.en/ an- sias las mas vivas al considerar innumerables almas en el infierno , 4 quienes no alcanzaria la copiosa re- dencion que habia de obrar el Señor. Al mirar los hor- rores. del gentilismo con la inmensa muchedumbre de sus ritos bárbaros , crueles ¿ impuros y:.abomiinables: al ver destruidos los grandes imperios delos caldeos, los medos:, los babilonios , los persas , «los asirios , y otros muchos, cuya inmensa muchedumbre de gen- tes no habia hecho otra cosa que nacer , Vivir y Morir, y condenarse : al mirar las extravagancias de la sina- goga , ya: idólatra ya fiel, «ya cautiva ya libre, ya 1a- 3 e la misericordia : que. su propio oficioy su verdadero

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