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NECESIDAD DE LA PENITENCIA, 45 ni aplacais la justa indignacion del Juez .supremo con frutos dignos de penitencia. ¿Puede darse conduc- ta mas irregular é inconseqiiente? Abandonar la hacien= da, separarse de la muger, desterrarse de los hijos, y exponerse 4. perder la salud y la vida por lo que im= porta casi nada, y hacer nada por lo que vale mas que: todo? Pues , señores , el decreto está dado: voso+ tros estais comprehendidos en él, como yo y todos los pecadores : ó infierno , Ó penitencia : Nisi ponitentiam babueritis , omnes similiter. peribitis. Hombres ambiciosos : vosotros rodeais .el mar y la tierra por:adelantar un grado.en vuestro empleo : vo» sotros | uir un temporal establecimiento ex. Locos unos vuestra vida á las hinchadas é inconstan- las de los mares, y. a da: peiado. Sure de dps vien» = Pr. :. Otros. 6 | s y ba onetas ; y sien o tan valientes por conse a e etaganiciai. solamente sois lsicubdides, sois débiles y delicados quando se trata de alcanzar un premio eterno, por medio del dolor, lágrimas y as- perezas de la penitencia. ¿Qué quiere decir esto? Lo que vosotros querais. Mas lo ¿que yo digo es is el de- + ¿Sois delicados? "Sedlo pe dida eran muchas Princesas y muchas Reynas, y sin embargo de su delicadeza afligian sus cuerpos con penitencias. De- licada era Santa Margarita , hija del Rey de Hungría, y 4 los trece años de su edad ceñia su cuerpo con una faxa de cerdas , le rodeaba con una cadena de hier- TO, y ponia abrojos en los zapatos. Delicada era San- ta Isabel, Reyna de Portugal , y ayunaba dos dias de la semána 4 pan y agua Delicadas eran Santa Catali- na de Sena ;,hen Teresa de Jesus, Santa Rosa de Lima y otras muchas Santas ; y con todo eso mace- raban sus carnes con ayunos, cilicios , disciplinas ,ca= > o $ Fa A Ue ia de E

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