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. a dE, ¿e E A NT e SOBRE EL NÚMERO DE DIAS, IC. . 307 la santa Uncion siquiera: ¡O qué erradas somlas ideas de los hombres! Hec est” amphora » bec est UPA. llenó el número que Dios le tenia señalado con dos pecados que se cometen en las rondas, con las pala= bras torpes, con los cantares lascivos , con las sober= bias, iras, robos y pendencias , con los porvidas y ju- ramentos , y descendió á rondar en la region de las tinieblas, y al lugar del sempiterno horror y espanto; Hállase el otro en la taberna,Ó sale de ella bien car- gado de vino : éntrale un accidente apoplético, y sin volver en sus sentidos, muere en su pecado. ¿Qué es esto? Hec est ampborá, becest mensura: llenó su nú- - mero, y cayó en el infierno , para beber allí por todos los siglos la hiel de áspides, y el veneno de drago- nes. Sale el otro amancebado de la Iglesia, sin tratar de enmendarse, 4 pesar de los esfuerzos del ministro de Jesuchristo, de los atractivos de la divina gracia, y de los llamamientos de Dios; y. Ántes de entrar en su casa se queda muerto en el camino. ¿Qué es esto? Hec est ampbora, bec est mensura : llenó el número de sus pecados con la ingratitud y «rebeldía 4 los au- _Xilios.de Dios; y fué 4 pagar en el infierno l s -tor- pes deleytes de su cuerpo. Acaba el 'otro cortejo de ofender á Dios, ocultando su abominable comercio con la máscara de las visitas corteses , y amistades ino- centes, y en los brazos de su ídolo es invisiblemente herido de la justicia de Dios, que le iba á los alcan: Ces, y esperaba aquel último pecado para arrojarle al abismo. Comulgan sacrílegamente aquely aquella, por callar vergonzosamente sus culpas en la confesion, por reincidir con freqiiencia en sus desórdenes, por no tratar seriamente de enmendar la vida despues de tan- tos años que viven pecando , y bebiendo como agua la maldad , y pensando que faltan: muchos pecados para llenar su número, se engañan lastimosamente , pues no faltaba mas que aquel para llenarse el cántaro, para Qq 2