BCCPAM000538-3-16000000000000

306 «SerMON XIIL. para quedarse con los bienes mal habidos: en la otra, abrasado de :la lascivia, se entrega 4 las acciones mas vergonzosas. Estos pecados , con su peso y su malicia, agravan el-alma , la inclinan mas al pecado, y la pro- porcionan para otros: sufre Dios á estas alias infeli. ces y precitas con mucha paciencia, como dice el Apóstol San Pablo : aguárdalas hasta que llenen su me- dida; y segun la priesa que se dan á pecar, y el nú- meroy medida que les señaló el Señor., llega el úl- timo pecado, y baxan con él irremisiblemente al in- fierno : Usque ad inferos peccatum ¿llius, que dixo el Santo Job admirablemente (a). Escuchadme. . Sale una jóven sin pudor y sin vergiienza de un bayle profano: llega á su casa fatigada, y llena de sudor , por los brincos, carreras y golpeos de su cuer- po, en que ha gastado algunas horas: bebe un traga de agua fria: sacúdele un tabardillo executivo, ó un dolor de costado agudo ; y sin Sacramentos camina á la eternidad. ¿Qué es esto? Qué ha de ser, dicen las gentes: el médico erró la cura, la sangró quando no qué error! ¡6 qué locura! ¡qué distintos los pensa- mientos de Dios, de los pensamientos de los hombres! Hec est amphora , hec est mensura : completó aquella ¡a- ten en los bayles con las miradas libres, con las pa- labras indecentes, con las acciones provocativas , y baxó á danzar entre los tizones del infierno. Anda el otro jóven de ronda en una noche, como lo tiene de cos- tumbre; y al volver una calle, le dan una estocada, y marcha inmediatamente al tribunal de Dios. ¿Qué es esto? Qué el señor Cura tardó en ir á la Iglesia, dicen los muodanos, que el sacristan estaba dormido , y no te- nia las llaves prontas, y el pobrecito herido se fué sin (a) Job, C. XXIV. V. 19»

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz