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Dex Fin PARA QUE Di0S NOS CRIÓ. 273 de las criataras tu felicidady tu descanso ; porqu su hermosura, sus riquezas , sus empleos , sus de no son mas que un encanto de los ojos , una ilusion del corazon y y un perjudicial hechizo de la voluntad : Za» nitas vanitatum , et omnia vanitas (a): todo es una va- - nidad , todo una verdadera perspectiva sin solidez, Pre- —gunta, si no quieres creernos , por la felicidad de quan- tos habitan la redondzz de la tierra: pregunta á los - Pontífices, Cardenales y Obispos, ¿si han consegui- do el fin para que Dios los crió,si nada tienen ya que apetecer? Y verás como te responden , que las mitras, _Capelos y tiaras no son mas que unos medios para lle- gar al fin; y unos medios á la verdad bien trabajosos, bien llenos de amargurasy de penas por la grandeza del ministerio, y la terribilidad de la a han de dar. de las almas que les encomendáron. Pregunta á los Príncipes, 4 los Reyes y 4 los Emperadc + ¿si viven conteatos con su suerte, si lográron el fin de su creacion? Y oirás que unos suspiran por la quietud y vida pacífica de los pobres : otros por el silencio y se- guridad de los claustros ; y que casi todos se quejan abrumados del peso de los negocios. ¿Qué es esto? No hallarse nadie en su fin, no hallarse en su centro, y vivir todos en un estado de violencia, aun quando po- sean los mayores bienes de la tierra. > e dial natural inst que os hace suspirar por vuestra verda: dera - os. ndo, entre el bullicio de : -que no estais para otra cosa en el mundo , sino para procuraf la felicidad eterna del cielo? Aquel interior consejero da remordimiento de vuestra conciencia, que jamas se aquista ni sosiega , ¿no os dice bien claro, que es en vaao buscar vuestro fin en este mundo? El temor del (a) Eccles. C. I. V. 24 : : : . y mn , TOM. ll. — MM E E ; pa R