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Somrz LA DevocioN, Sc. dor citaciónes sia hácer,:y al fin pronunciase una senten- - cía precipitada y sia conocimiento exácto de: la parte: donde se hallaban la verdad y la justicia? ¿Qué diria-- repito , de un hombre de este carácter? Qué ha= ecir , ni qué habiamos de pensar , sino que- este ; aquel y los otros que hemos nombrado poco ha, faltaban enormemente al cumplimiento de su obli- gacion , á la sombra de una devocion fantástica y mal. entendida. Es pues una regla excelente , amados mios, juzgar de nuestra devoción por nuestra obligacion , y establecer nuestra devocion sobre el cumplimiento exác-_ Sa to de nuestra obligacion: regla segura , regla general, | e todas las personas del mundo. To- | da otra devocion sin esta idea no es mas que una de- maginaria ; y esta sola sin a de las pe elevarnos al mas alto grado de santidad. - -Dixe' tambien , que los verdaderos devótos no solo haiga su mérito para con Dios, cumpliendo exácta- mente con sus obligaciones, sino que tambien halla- ban en esto su mismo placer y gusto. No ignoro que el Evangelio mos intima una mortificacion continua; tambien sé que hay una cierta quietud de alma e omegusto interior, que ++ consinles isubrnizicra devocion , y nos le hace: hallas en la práctica y cum= plimiento de nuestras obligaciones. Porque , piense cos mo quisiere la libertad y el desórden , a el 1 TOM. ll. cc