BCCPAM000538-3-16000000000000

SOBRE LA DEVOCIÓN, átc. 197 siones! ¡ Quántos deshonestos , conociendo al ri golpe de la divina palabra, su estado infelicísimas han llorado amargamente sus pecados, han mortificado sus carnes con ásperas penitencias; y despues de haber he-= cho una confesion general con abundancia de lágrimas, han. po do una vida irreprehensible enmedio del mundo : ó abandonando el mundo, se han retirado á los monasterios, para acabar su vida entre los prove= chosos rigores de la vida religiosa ! ¡Quántos robado- res de la hacienda agena han restituido los bienes mal habidos; y justamente atemorizados de la gravedad y tia de su pecado, han procurado con sus bienes opios socorrer largamente las necesidades de sus pró- ximos! ¡Quántos jóvenes, que en algun dia fuéron el escándalo del pueblo , se trocáron, por la poderosa gracia de Dios, en “unos modelos: de christiandad y de edificacion! ¡Quántas doncellas ; entregadas á to- dos los placeres de los sentidos, vanaménte ocupadas en galas , en bayles, en juegos, en cortejos , en enamo- ramientos , quedáron convertidas despues de la santa mision en unas doncellas honestas , humildes , modes= tas , retiradas , laboriosas, freqiientes en los santos Sa- cramentos, y asistentes á todos los exercicios de pie- dad y religion, de que ántes vivian tan distantes! ¡En quántas casas se hospedó el buen órden que ántes se ignoraba! ¡O Dios de bondad infinita ! ¡ quántos. de estos excelentes exemplares vemos en cada santa mi= sion! Frequenter vidimus de frigidis ad spiritalem per- venire fervorem. Pero al mismo tiempo (;¡ Ó verdad dig- na de llorarse con lágrimas de sangre!) los que ha- 11ó la mision en el estado de la tibieza , en aquel es- tado triste, cuya descripcion os dí. poco ha, en aquel mismo estado se quedéron. Lastimosamente engañados con su aparente virtud, no viendo en sí mismos aque- llos desórdenes groseros que se resisten naturalmente 4 una decente crianza , no hacen esfuerzo alguno por sa- E.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz