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a 37 o , en ás.anto, 285 y Y. hasta en las rn , ¿qué efectos em. ¡racion en las personas de menor esfera? ¿Adó: tará seguro un hombre en tan triste der rá de su patria, y se procurará ocultar en, las tierras mas distantes? Allá le seguirá la lengua mal- diciente : Lingua eorum transibit in terra (a). ¿ Qué ha- rá una pobre doncella , que sabe tiene perdido su cré- dito por las lenguas maldicientes? '¿Morirá de pena? En el pepalena hará revolver sus huesos el murmura= dor, y sacará sus flaquezas 4 la vista de las' gentes: se os nan (b). ¿Subirá al cielo la,paciencia en Is j a la penitencia ver= i S Ni aun en el cielo estará. se- gara Po suert *cehimos suum (C): 1 el z 5 : a! 5 .i A . -= ná mt, Mr o infierno , dor no habe su O SA - s ncias de sus detractores, por: haberse ) des los, ¡Ay! Hasta en el Auborko la bus= cará- la lengua murmuradora , y aumentará la turba= cion en que se paña tódeada de condenados, y de demonios ; Usque ad inferosAS ¿llius (d) ¿Puede errar ore», coa ma4s:espantosa! y mas funesta? ¿ Es de que ni en l: , ni en el cielo, ni en los Rola ni en el inferno ha de: estar una persóna segura de los murmuradores? ¡O , con quánta razona Jet Pr ds Sa: mira no Da 8 pe A hd que ocasiona en el queo los que escu la murmuracion. y] 2 propagan, yna penosa mmur- - 0 EnouoeT q anna Pra > y 002 207 Agos a Pot. LXXIL. Y. gi 0 Ezechiel. e; xxxvit. v. 13. (c) Psalm. 1xxt1. v. 9. (d) Job, c. xxiv. y. 19. TOM, Il. s

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