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A | enilsb que sabemos €es,¿gos a miéntras 108 2: SERMON V. 1 eternidad, para nunca salir de él (a). Acaba , en , 65) de sucederles lo que á vosotros y 4 mí nos puede aho= ra mismo suceder, pues para todos es oculta la eter= nidad, y caéremos en ella $uando ménos lo pensemos. ¡Pero ay , que lo mas terrible está en que , no solo es oculta en quanto al tiempo ,,sino tambien en quan= to al estado en'que nos sorprehenderá! Circunstancia formidable , que hace terribilísima la eternidad. . Sí. señores : nosotros ignoramos :si* nuestra ri 103 preciosa en: los ojos de Dios , como es | justos:: si por. una; gracia. | 1 remos. arrebatados de-entre los hombres, para que su conversación no nos contamine , ni corrompa el can- dor de muestra inocencia; ó si acabaremos con la muer- te pésima de los pecadores. ignoramos si esta noche misma:nos dirán como al rico del Ey: o: Stulte hac nocte animam tuam. repetunt a te (b): esta arrancarán tu alma , y la actojarda Tel ls Anti = £ 24 E 6 de > 1 de «i e Ly e eN e a o e E y da A 4 E y ] > y > se dombre DO *i Dios no Sres Se o ible voluntad. Pero aun quando ahora supiéramos que ama= mos > Dios con todas e US de nuestro, e 5” q » => mea oa cil a ias > . ria ; rodibd nos ers ana eventádad: feliz? 2. me nos dará certidumbre de la perseverancia? Salomon, Judas , Saúl, y tantos otros, ¡Ó quántos años anduvié-= ron por las sendas de la justificacion , agradables ob- jetos á la divina Magestad! Pero la falta de la perse- verancia en el bien hasta la muerte , los hizo indig- nos de la eterna vida : Qui se existimas stare, videas PON RoeCoapa quia morerear, Lib. 1. Machab 1 6. b) S E C. XIL. Y.. 20. | <A AA mol $2 Ai o >

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