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a e De La MisekicorbIaA DE Dios. 33 SEGUNDA PARTE, Un pecador que por una larga serie de años se ha domes» ticado! cón la culpa, quanto mas se empeña en saciar su: desa enfrenada concupiscencia , tanto mas se aparta de Dios , que es el único, el sumo y verdadero «bien , y se convierte. á las criaturas frágiles , corruptibles y miserables. El , multiplican» do sus pecados, llega como á:embrutecerse, y no pensar en sú alma , que.tiene muerta por la culpa», ni en el cielo , de don- de se ha desterrado por sus pecados, ni en Dios, á quien tiene infamemente ofendido y perdido. «Al mirarle la divina misericordia en estado tan pésimo y abominable ,: ¿qué arti. ficios;¡no,adópta para arrancarle del vicio , y hacerle obrar la virtud? A. la manera de un pobrecillo ,: que afligido de la ne- cesidad , acude 4 las puertas de quien puede: socorretle , y con una,instancia importuna clama incesantemente: hasta que le socorran ; nuestro buen: DiosAlama:á4:la puerta' de un <o- razon. obstinado, y "sin entibiar su amor las' fréqiientes .repul- sas que Experimenta ; insta y persevera llamando , hasta que por medio de una conversion sincera le dan entrada en el al» ma ; Etec sto. ad ostium.,-.et pulso (a). Mirad:, dice: el Se» ñor , yo estoy 4: la. puerta de vuestro» corazon y llamo.de mil: maneras , tan diferentes como prodigiosas : si escuchaseis mi voz , y. abrieseis la puerta , entraré á vosotros , y habitaré en vuestra compañía. Yo os.lamo, unas veces como rey mag- nífico y poderoso , «presentando 4.vuestro-espíritu; “ya :las: ri- quezas de mi gloria, las:delicias"de mi:casa ; las grandezas so- beranas de mi reyno , «pará atraeros por:medio de“estósobenez ficios infinitos 4-la observancia de mis preceptos y y:4:la exe= cucion de mis mandatos ,:ya los suplicios eternos, 4: que dese (a) Apocalyps; cm y. 20.” 90, 1/M10n 13 109 TOM. IL. E