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336 SermoyN XIIL terminó el número de dias que hemos de vivir , y el número y gravedad de los pecados que nos ha de tolerar , de la mis- ma suerte decretó el número de auxilios que nos habia de con- ceder : Omnia in mensura , ctnumero , et pondere disposuisti. Sí, amados mios : verdad es de fe, que nada: bueno hay en nosotros que no lo hayamos. recibido : todo ha descendido del Padre de las misericordias , y Dios de toda consolacion, que manifiesta su misericordia enla eleccion de unas perso- nas, y su terrible justicia en la reprobacion de otras : él abor» rece á unos , como á Esaú, ántes que hiciesen mal alguno ; y amó á otros, como á Jacob , ántes de todas sus buenas obras. No es el cielo del que lo quiere , ni-del que corre , decia el apóstol san Pablo , sino de aquel de quien Dios tiene miseri- cordia. Es verdad que ésta en sí misma es infinita , como atri- buto inseparable de Dios; pero en sus efectos , ó considerán- dola.con- respecto á sus criaturas , es finita y limitada : sus gracias , sus auxilios y sus dones los reparte. como quiere-su . divino espíritu. Á estas, personas «concede unos: á aquellas concede otros: dispensa á unos mas, y á otros ménos: Secun- dum propositum voluntatis sue. A los que-usan bien de sus auxilios , les comunica otros.de nuevo ,' con que van subien- do de virtud en virtud, hasta wer al Dios de los dioses en Sión: al que abusa de los auxilios que le ha: dado»,:no le concede otros; y en castigo de su:pecado le priva aun de aquellos que anteriormente le habia concedido. ,Así lo dice ek santo evan- golio de Jesuchristo (a). Esta substraccion de! auxilios con que el Señor se aparta de los pecadores, es uno de los cas- tigos mas formidables ,con que puede herirlos su soberana justicia. ¡ Ay de ellos , dice Dios , quando me aparte de (a) ¿Omni.enim habenti dabitur :; ei autem qui non babet , et quod vi= detur babere, auferetur ab e0..S. Matth, C. XXV+ Y» 29» LS