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a A : EA 172, AER , A pa Y e a > ai A A 1] 328 : SermoN XTIL. castigo de aquellos pecados con que llenó su número : en este infeliz estado prosigue pecando el hombre con :tran- quilidad y sosiego , y bebiendo los pecados como agua, como dice la escritura 5 y porque como se halla, aunque sin conocerlo él, desamparado de Dios, y entregado á los movimientos viciosos de su corazon , le arrastran sus pasio- nes donde quieren: él jura , maldice, blasfema , luxuria, hurta , murmufa y se embriaga : él oculta:sus pecados en la. confesion:¿;:6 los “confiesa sin el debido exámen , sin dolor sobrenatural, sin propósito constante: él se acusa con una estupidez é insensibilidad que asombra : arroja por su pestífera. boca un rio de iniquidad, pero con una indi= ferencia que horroriza , escandaliza á sus próximos causán- doles con sus palabras indecentes y acciones abominables -mil ruinas espirituales en sus almas, y.en vez de confun- dirse al verse reo delante de Dios de la muerte eterna de sus hermanos , se alaba: del pecado cometido , y prosigue «frescamente en el pecado. Finalmente , por haberse he- cho sordo 4 la voz: de Dios es abandonado á4 la: ignominia de sus pasiones, hasta que llenando el número de sus dias -da la muerte con-él en el infierno. Esta clase de hombres -son' puntualmente de quienes dice el Señor: yo les he de- e ATAN £ AN xado seguir en sus desórdenes , y vivir: conforme á los deseos viciosos de su corrompido corazon : anden por don- de quieran estos pocos dias que les restan , que una eter- «nidad me queda para castigarlos con todo el poder de mi “omnipotencia; y toda la severidad de mi justicia: Dimisi -gos secundum desideria cordis corum , ibunt in adinventio- tmibus suis (a): ¡Ahora pues, amados mios : es una verdad de fe, que (a) Psalm, 1xxx. y. 13.

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