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- * A 47 con ardor , y esfuerzo le sirvamos, añadiendo 1: lo precep- tivo quanto entendemos le es grato. Y la perfeíta, aquel lleno, y grado de perfeccion que a cada qual nos señala. (1) : Ocioso es, Ilmo. Señor , repetirle su obligacion en llenar las Leyes de su estado , que para conformarse con la voluntad buena de Dios, se le pide; siendo suficiente 4 su alta comprehension lo que dexo ya insinuado ; no obs- tante para su confirmacion no omitire el Ministerium tum imple del Apostol al Santo Timotéo. No excusare la alta expresion de San Ambrosio a los Sacerdotes: Scienti Le- gem, 27 non facienti peccatum est grande. (2) Al que le cons= ta la Lei, y no la practica, se le agraba el pecado : y de consiguiente la pena, porque conociendo la voluntad de Dios, no quiso obrar segun ella. Asi Christo mi Señor en su Santo Evangelio lo asegura. 1/le autem servus, qui cog» novit voluntatem Domini sui, €% non fecit secundum volunta* tem ejus vapulabit multis. (3 ) Poco harémos , Señor, si queriendo como es debido conformar , 0 regular nuestras obras por la Divina volun- tad , solo atendemos a lo dicho sin añadir nada mas. El Señor exige de nosotros el miedo de ofenderle, y el cui- dado de agradarle. Aquel en guardar los preceptos; éste en seguir los consejos lo acreditamos. Lo uno, y lo otre nos es para la perfeccion preciso. Lo. primero coma esen* cial , To segundo como instrumento y medio para ella. Es- ta es la voluntad, y agrado en Dios, ó loque para agra- darle le conviene. bacer 4 un Canonigo, Dignidad, d Prebendado. En efecto, si en un seglares indicio de su escaso amor 2 Dios.obrar solo aquello que no puede ex» cusar sin culpa grave, y sin detrimento propio ¿qué en un Sacerdote cuya obligacion le excede casi infinito? m ¿Quan (1) Ibidem Lit. C.. (2) $. Ambros. Tom. 5. de Dignit. Sacer- ot. €. 3. circafinem. (3) Luc. 12, 47. Me SY