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218 MES DE AGOSTO y este ha sido el lenguage de todos los Santos , atenúa- dos sus ojos, mirando al Cielo su patria, reputándose co= mo forasteros y peregrinos: en este mundo. Hagamos nosotros lo mismo, y roguemos al Señor por tantas al- mas como estan engañadas con las vanidades de la tierra. Seamos perseverantes en el amor de Dios, aunque pa- dezcamos muchos trabajos, que en la hora de la muerte es echaremos mil bendiciones, como se las echaban los: Santos. Suspiremos por la gloria, suframos con paciencia; que es muy grande el premio: Dios nos lo conceda. «Asi sea. Salm. 118. v. 20. en la confesion que hiciste, Mi alma ansiosa peor que entraste saliste. De tu ley eternal que ya ha Sentencias gustado, La prudencia es una vir= Otra ninguna cosa tud directora de todas las Jamas ha deseado, virtudes, que nos enseña á Sino siempre observar lo huir los extremos. que has mandado. Faculatoria. Saeta. Señor, solo á vos se debe Si culpa mortal callaste el honor, alabanza y gloria. CONSIDERACIONES DE MARIA SANTISIMA nuestra Señora. .= De su vida escondida en Nazaret. Considera 4 la Santísima Virgen llena de delicias en una dulce soledad , considerando á su querido Hijo ocu- pado en las mas eminentes virtudes en aquellos años has- ta la edad de treinta en que se manifestó al mundo. ¿Quién es capaz de referir las piadosas conversaciones de aquella santa familia? San José, con su trabajo, procu- raba proveer á las necesidades de la vida, y la Santísima Virgen cuidaba de su distribucion , sin perder de vista á su querido Hijo. Jamas hubo vida mas perfecta; jamas se vió familia mas santa, mas respetable, mas dichosa,