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59 no pueden ser contrarias al Derecho común, ni supra Regulam?. En nuestra Orden no puede el Capítulo Pro- vincial establecer leyes perpetuas, pues obstan las Constituciones que dicen: «Nec fiant Consti- tutiones Provinciales, sed evenientibus alíís ca- sibus particularibus, de is in tabulis Capitulo- rum (Generalium provideatur ac ordinetur»?, Puede, sin embargo, el Provincial con su Defini- torio dar leyes ó estatutos para corregir abusos y promover la regular observancia, sin necesidad de consultar á los Capitulares; mas dichas orde- naciones solamente tendrán fuerza durante su gobierno?. Asimismo puede el Capítulo reservar casos en toda la Provincia*;, pero en nuestra Orden no. salvo si se trata de los once contenidos en el de- creto de Clemente VIIF, pues Paulo V derogó el año 1608, en cuanto á nosotros los Capuchinos, la facultad de reservar otros casos que los expre- samente contenidos en el citado decreto de Cle- ' Tbidem, n. 96. Cap. XII, n. Y. Utrum in Capitulo Provinciali Minister Provincialis et quatuor Definitores possint statuta aut decreta emittere, incon- sultis Capitularibus, Guardianis et Discreto?—Si nomine statuto- rum intelligantur ordinationes et providentis ad tollendos abu- sus, affirmative; si vero intelligantur leges seu Constitutiones perpetuse, negative. Anal. Ord. Cap., Vol. VIL, pag. 272, IV, n. 5 et Piat, Mont., t. 1, pag, 568 et seg. * Pellizar., loc. cit., n. 98, Cf. Epitom. Const. Apost., pag. 44,