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304, TRATADO PARTICULAR, , R. Del amor propio, voluntad pro. pia y juicio propio, que son tres fuentes. de donde salen los vicios. Amor propip. es el que tiene por fin los gustos sengi.. bles del cuerpo , la propia utilidad y | conveniencia temporal. Causa tanto da. ño , que así como el amor de Dios da un gran mérito á las cosas mas míni- mas , el amor propio quita todo el mérji. to á las obras que parecen mas santas, La propia voluntad es aquella con que el hombre en las ocasiones libres se busca á sí mismo y no á Dios. Si nin- guno hiciera su propia voluntad , nin- guno pecara. Yo en la profesion que de- seo tengo de hacer voto de obediencia; quiero pues ahora ir aprendiendo á no hacer mi propia voluntad , supuesto que entónces la he de negar del todo. El juicio propio es quando el hom- bre juzga de las cosas , porque así le qua: dra á su entendimiento. Es fomento de | los vicios, y dañosísimo; porque de él han nacido todas las heregías, y salen ahora todas las Contiendas que hay en el mundo. Ya veo, que el amor propio| y voluntad propia echan á perder todasf

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