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164 TRATADO TERCERO. inferior del hombre, contra quien. le im. pide lograr su natural apetito, pr el entendimiento discierna si es bueno 6 malo moralmente lo que apetece. Al mo». do que un perro se enfurece contra quien le quita la comida que tiene delante, Si el hombre , conocido su yerro, prosigue en su ira, "entónces pasará esta pasias dexándose vencer algunas veces, á ser vicio capital. ? Se preg. lo quinto; Sucede algunas veces , que durmiendo un hombre le pa- rece en sueños estar executando un ato de venganza ó sensualidad con tanta yi- yeza, como si realmente se hubiera se- guido el efecto ; ¿ podrá de esto formar- se algun.escrúpulo? Se resp. Que miéntras el hombre der. me ,el entendimiento y voluntad no tie- nen libre exercicio., y todas aquellas, e. presentaciones están enla fantasía ó ima- - ginativa , que es la parte animal; pordo que en quanto sucede en sueños no hay culpa. No obstante debe advertirse , que si pasados tales sueños la voluntad se » legra de haberlos tenido , este gusto se 3 E rá ya culpa; si ántes de dormie el h 3 > e. E