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POR LA TARDE. 410 las : y para que no nos engañemos , pongamos á la vis- ta el tema que nos guia : Habentes alimenta , S quibus tegamur bis contenti sumus. 6 Lo primero con que dice San Pablo se han de contentar los Eclesiasticos, y en que santamente pue= den gastar de su renta Eclesiastica lo necesario , es el sustento suyo y y Conveniente sustentación de su familia. ¿Pero en qué sustento? ¿En qué familia? En una mesa moderada , parca , pobre , como , aun hablando de los Señores Obispos , ordena el Concilio IV. Cartaginen= se, (16) a cuyas disposiciones se remite el Sagrado Tri- dentino , (17) para alimentarse á sí , y sustentar solo aquel preciso numero de familiares indispensables para su servicio , en tal manera , que ni por exceso se os- tente vanidad , ni por defeéto parezca la mesa de los Eclesiasticos rancho de rusticos pastores. Esto es lo dis» puesto en los Canones llamados Apostolicos , y lo que el Papa Urbano VIIL. declaró por licito : (18) y asi es constante , que solo puede gastar el Eclesiastico en la mesa lo verdaderamente necesario para un modera- do sustento, y para alimentar los necesarios serviciales de su casa. ¿Pero será licito gastar, y cortar por lar- go para mantener un numero excesivo de parientes , que diariamente se sientan á su mesa , Ó comen de su ca- sa? ¿Una multitud de sobrinos que le dá un herman», que como hay quien pague la comida , sin ganarla él ,se anda todo el.dia con la capa al hombro? ¿O un sobri- no , que seguia los Estudios , y con la ociosidad , y buen plato de casa de su tio , se mal casó , sin oficio, Dd 2 y (16) Supra num. 2. 82 3. (17) Concil. Trident. sess. 25. art, 1. (18) Epist. vicca , cap. 1. Can. App. 75. 6 79.
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