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7 Es, A 27” ey ae, AD 7 na 7 AO 382 DiA SEPTIMO | ( 1 guien las dice; por lo que dixo San Chrysostomo y (32) e! que los Seglares, por malos que sean, se compungen, y d l h corrigen una vez, ú otra en los Sermones ; pero los Cle- rigos que llegan a este estremo , nunca. 25 Y si esto siente el Santo de los que son abierta- ¡ , ¡ mente malos , cuya llaga , al fin, es manifiesta yy por MA tanto en alguna manera curable : ¿qué diré yo de los que acostumbrados á vivir sin Oracion , sin leccion , sin es- ; tudio , y en fin entregados á una perpetua ociosidad, les 1 | 1 parece que no tienen culpas , solo porque no matan , no A MINA hurtan , ni fornican? Confesaré de plano que no tengo es- piritu aun para intentar su correccion : y: asi, dexados | 4 estos , si por desgracia hay algunos entre vosotros y por MN incorregibles , me convertiré a exortar a los demás a tra- | m bajar en la Viña del Señor , en el Pulpito , y Confeso- AN nario , para dar fin A esta platica. Ml! 26: ¿Cómo , Padres amantisimos , podemos contener | las lagrimas , y estarnos mano sobre mano , viendo las pl MN mysticas vides de esta Viña : las almas, digo , redimidas Ml con la Sangre de nuestro Redentor , perdidas por falta Ml de Obreros que con santas táreas-las cultiven? Si Mardo- 1 queo , decia mi Doétor Serafico, (33) lloraba continua- mente la muerte temporal de los Judios : ¿Cómo: noso- iros 3 Ministros de Jesu Christo , no lloramos la eterna de los Christianos? ¿Cómo, viendo precipitarse en el In- fierno como ciegos tantos y no les gritamos desde el Pul- pito ?.¿Cómo-con. caridad no les damos la. mano en el Confesonario?:¿Cómo., por no'tomar un poco de trabajo en estudiar , y aplicarnos á nuestros ministerios , sufri- mos con paciencia impia , que se condenen tantas almas? E ¿Que — (3) PD. Joan. Chrysost. Homil. 43. (33) D.Bonavent. Stim. Amor. pars 2. Cap. 11, per totum,