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POR LA TARDE. 327 19 Pues desengañaos todos de esta vez. Una de dos. O sabeis , 9 no sabeis. Si no sabeis, ocupais el puesto inutilmente , indignamente y y si no adquirís la ciencia necesaria para el exercicio de regir las almas; sea porque no estudiais , porque vuestro estudio no es en los libros que conviene; Ú porque no podeis ya con- seguirla , estais en estado de condenación , y no pue= de haber salvacion para vosotros , mientras no os apli- cais á conseguir la ciencia , Ó renuncias el empleo , st no sois capaces de alcanzarla. Si sabeis , y teneis cien- cia suficiente , sois homicidas de vuestras ovejas, quan- do por vuestra desidia , por no usar de el talento , y la sabiduria las dexais enfermar , 9 morir espiritualmen- te, d no las curais estando enfermas. 20 Y -si alguno de vosotros piensa , que solo es indubitable esta doétrina, hablando de los Parrocos, y de los otros que tienen cargo de almas por sus B:nefi- cios 3 ¿ignora éste aquella sentencia de San Juan Ch-y- sostomo , que enseña, que quien puede socorrer al pro- ximo gravemente necesitado , y no lo hace , es homi= cida de su hermano? Pues si vosotros teneis caudal de ciencia suficiente , para socorrer espiritualmente á los Fieles , que tan necesitados están de luz, y de doc- triva , en unos tiempos en que tan á obscuras andan los mundanos , que parece se llegan 4 persuadir, que es bueno ya" lo malo : que se ha: de preferir el luxo a la moderación : la riqueza 4 la probeza ; y aun el desca= ro A la modestia : y no lo haceis , por no instruirles solidamente en las verdades de la Religion : seais Par- rocos y 9 no lo seais: ¿por qué no conocereís que sien= do Sacerdotes , sois reos de quantas múertes espiritua- les incurren las- almas por falta de doftrina? ¡Ay de nosotros , Sacerdotes! "¡Y qué juicio tan tremendo nos X4 aguar-