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218 Dia QUARTO 13 Pues qué , Padres amantisimos , quando haga- mos eso, y quando no lo hagamos , como por muchos dice San Basilio , (53) vagueando con la mente, mien= tras oramos con la boca , quedando luego neciamente persuadidos , a que oyó Dios , lo que nosotros mismos no vimos formalmente : ¿será eso bastante? ¿Será ora- cion esa suficiente , para alcanzar la paz para los Prin- cipes Christianos? ¿La comunicacion de nuestra Santa Fé á los Hereges , y Paganos? ¿ La conversion para los pecadores? ¿La gracia de la perseverancia para no- sotros mismos , y lus otros justos? ¿La lluvia para los campos en las sequedades? ¿Y en tina palabra , los bie- nes necesarios para nuestro pueblo ; y la cesacion de los males , y castigos con que enojado Dios le aflige, y castiga muchas veces? ¿Bastará eso para sostener la Iglesia , como: la sostuvieron otros tiempos los Gloriosos Padres Santo Domingo , y San Francisco , en los pre- sentes , en que podemos temer con fundamento una rui- na universal de las costumbres ; trocandose el Chris- tianismo en un práético ateismo : pues vemos , viven en él tantos Christianos 3 llegando el descaro de mu= chos á decir sin verguenza abiertamente, que si son Hereges de los Mandamientos , son Catolicos de los Articulos? ¿Quién ha de ser tan necio , que juzgue nuestra Oracion bastante para todo esto ? ¿ Quién no ha de conocer , que fuera una temeridad ridicula , por no decir descarada , emprehender la consecución: de cosas tales, por .una Oracion , casi de burlas , que ha- cen muchos en los Mementos de la Misa ? Pues ello, Padres Venerables , 4 tanto estamos obligados porel Sacerdocio ; y mientras no seamos para tanto , no ses re- (53) Citado de Regula Cleri cap. 6. art: 2,

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