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qn” 182 DiA QUARTO : uncion de su Divino Espiritu : Estar consagrados para su servicio, y no tener los ojos de la mente aten tos 4 su voluntad : Ser sus familiares, sus favorecidos , y.no conversar con él frequentemente : Ser sus amigos , amar- le con benevolencia verdadera , y apenas acordarnos ¡de €lL + todo 'estó no puede ser obrar con consequencia. No puedé 'ser acertada esta conduéta. No -puede ser este camino que llevamos de buenos Eclesiasticos , ni “aun de Segláres pios. Si hemos , pues y de andar con-= forme A nuestra «vocacion, debemos insistir en nuestra santificación , y perfeccion , andando siempre en pre- “sencia de su Magestad con deseos fervorosos', afeétos piadosos , suspiros tiernos , y VIVOS anhelos de agra- «darle , que es el camino para la perfeccion , que enseñó “Dios al Patriarca Abrahan : Ambula coram me , €S esto perfeítas. (5) Por aqui podremos seguir el camino. de “nuestro destierro sin tropieza y aun quando mucho se “prolonge 3 erotra forma , aun quando sea muy breve, itropezaremos en él'2 cada paso: porque andar pisando “siempre entre lazos , ya descubiertos , y ya ocultos; sin ir siempre teparándo donde ponemos los pies , y «no enredarnos en alguno, es imposible : es un milagro”, y milagro que no nos podemos prometer sin temeridad. +12 Ea, pues, alma mia , proveamos de tener sierh- «pre a Dios á nuestra vista, cómo lo hacia el Rey Da- id. (6) Tengamos siempre puestos en él los ojos de “muestro entendimiento , quanto A nuestra fragilidad sea posible, Sea todo nuestro estudio en adelante, continuar la Oración A Dios , 'que es nuestra salud. En'todo lu- gar , en todo tiempo, quando comemos , quando con- ver- Y . («) Genes. cap. 17. Y. I. — (6) Psalm, 15. Yo 8.